Así comenzamos.

Borroso, como mis conocimientos en este nuevo mundo de la "blogueria" en el que me estoy metiendo, así es mi caminar en esta mi primera entrada. Pretendo solamente dar a conocer algunas facetas de mi vida, en la que he tenido la gran suerte de compartir esperiencias de gran valor junto a un grupo de amigos que me han hecho crecer como persona. Siempre he dicho que he tenido en la vida la gran suerte de hacer las cosas que quería hacer, y en la obligación y la devoción, han estado presentes mi profesión, a la que amo con locura; y mi devoción como voluntario, que ya no ejerzo, pero de la que guardo un inmenso ejército de amigos, y un imborrable album de fotos en mi memoria.
Mi obligación se viste de azul, mi devoción se vestía de naranja, esa es la razón de "la Vida en Colores".
Como comienzo a esta aventura, vaya como ilustración esta primera foto que nos hicimos como miembros de un colectivo que nació para servir a su pueblo y a su gente, con una enorme ilusión que a buen seguro seguirá sintiendo todo aquel que se ve reflejada en ella. Mis intervenciones en este blog van encaminadas a rendir mi homenaje, respeto y admiración por las personas que intervienen en ellas, y en este caso especial, a los integrantes de esta primera foto: (de arriba a abajo y de izquierda a derecha).
Manuel Jiménez Ruíz, Pedro Castilla Emeterio, Manuel Palomo Mora, un humilde servidor, José Gómez Cubiles, Honorio Cárdenas Fernández, Enrique Fernando Marquez Maestre, Jose Manuel Núñez Domínguez, Manuel López Gómez, Blas Perdigón Panduro, Antonia Márquez Maestre, Luis José Lorenzo López, Manoli González Fernández de Cora y Agustín Celestino Valdivia.
Como aquel día, hoy empieza esta aventura, de la que tan solo pido, me dé la oportunidad de seguir creciendo con vosotros